DERECHOS RESERVADOS

DERECHOS RESERVADOS
CREACIÓN DISEÑO Y PROPIEDAD INTELECTUAL DE INGRID ODGERS ESCRITORA EDITORA Y CRÍTICA

Estamos en:

comentarios

«Leer sin meditar es una ocupación inútil». Confucio

Vistas de página en total

domingo, 26 de agosto de 2018

Al sur de la frontera, al oeste del sol de Haruki Murakami


AL SUR DE LA FRONTERA, AL OESTE DEL SOL

HARUKI MURAKAMI

Tusquets Editores S.A. 2003





Al sur de la frontera, Al oeste del sol es una obra del autor japonés Haruki Murakami, escrita desde la estética de la nostalgia inserta en una soledad dolorosa donde el recuerdo del primer ser amado, Shimamoto, el amor del período entre la infancia y adolescencia marca la vida del protagonista hasta el presente narrado.

El tiempo presente en la obra se desenvuelve en Aoyama, cerca de la ciudad de Tokio, donde el protagonista cursó sus años de universidad, se casó, tuvo dos hijas y emprendió un negocio, un Club de Jazz, especie de pub chileno con música jazzística, empresa de gran éxito que lo lleva a abrir otro similar en algún lugar de la misma ciudad. El protagonista tiene treinta y siete años, una vida aparentemente feliz, lo tiene todo en lo económico, en lo sentimental, en lo filial, pero la nostalgia de su ex compañera de curso lo invade en medio de su cotidianeidad. Algo falta, un vacío se agita en su interior. Como empresario exitoso es entrevistado por una revista, una revista que tiene alta circulación y que tiene un efecto directo en su vida, aparecen en el Club de Jazz, sus ex compañeros, charlan con él, beben, y de repente, luego de un tiempo aparece Shimamoto, y su vida se transforma en un caos, una bomba anuncia su estallido. Algo acontece en el chalé de Hakone, propiedad de Hajime que desemboca en un desenlace inesperado.

Esta obra de Murakami, minuciosamente narrada conmueve el ser interior, remece el alma y nos deja pensando en ese misterio que jamás se resuelve. Una excelente narrativa que simple y sencilla traspasa nuestras fibras, dejándonos una lección admirable de literatura. Un libro muy recomendado a todos mis asiduos lectores.


Ingrid Odgers Toloza

Concepción de Chile, 2018


Fragmento.

  
A  lo lejos, Nat King Cole cantaba South of the Border. Nat King Cole se refería a México, claro. Pero yo entonces no lo sabía. Las palabras « Al sur de la frontera» me sonaban enigmáticas. Cada vez que las oía, me preguntaba qué diablos debía de haber allí,al sur de la frontera. Abrí los ojos. Nat King Cole cantaba South of the Border. Hacía mucho tiempo que no la  escuchaba. —De pequeño, cuando oía esta canción, siempre me preguntaba qué debía de haber al sur de la frontera —dije.
—Yo también —coincidió Shimamoto
—. De mayor, cuando leí la letra de la canción, me llevé una desilusión.
¡Sólo era una canción sobre México! Yo que pensaba que al sur de la frontera debía de haber algo maravilloso.
— ¿Como qué? Shimamoto se echó el pelo para atrás con las manos y se lo recogió.
—Pues no lo sé. Algo muy hermoso, grande, suave.
—Algo muy hermoso, grande, suave —repetí—. ¿Se puede comer?
Shimamoto se rió. Pude entrever sus dientes blancos.
—Quizá no.
— ¿Se puede tocar?
—Quizá sí.
—Me parece que hay demasiados quizás —dije.
—Aquél es un país con muchos quizás.
Alargué la mano y le toqué la suya, que seguía apoyada en el respaldo.
Hacía mucho tiempo que no se la tocaba. Desde aquel vuelo, de Ishikawa a Tokio.
Cuando le toqué los dedos, ella alzó un poco la cabeza y me miró.  Luego volvió a bajar los ojos.
—El sur de la frontera, el oeste del sol —dijo.
— ¿Qué es eso de «el oeste del sol»?
—Existe de verdad —dijo—. ¿No has  oído hablar de la histeria siberiana?
—No.
—Lo leí en alguna parte hace tiempo. Creo que cuando iba al instituto. No logro recordar dónde, pero, en fin, era una enfermedad que sufrían los campesinos de Siberia. Imagínatelo: eres un campesino y vives solo en los páramos de Siberia. Trabajas la tierra un día tras otro. A tu alrededor, hasta donde alcanza la vista, no hay nada. El horizonte al norte; el horizonte al este; el horizonte al sur; el horizonte al oeste. Nada más. Todos los días, cuando el sol sube por el este, vas al campo a trabajar. Cuando alcanza el  cénit, descansas y comes.
Cuando se oculta tras el horizonte, al oeste, vuelves a casa y duermes.
—Una vida muy distinta a la de llevar un bar en Aoyama.
—Sí —dijo ella sonriendo. Y ladeó un poco la cabeza—. Muy distinta.
Y eso, día tras día, año tras año.
—Pero, en Siberia, en invierno, no se pueden cultivar los campos.
—No, claro —dijo Shimamoto—. Durante el invierno te quedas en casa trabajando en cosas que puedas hacer en el interior. Y, al llegar la primavera, vuelves a salir al campo. Tú eres ese campesino. Imagínatelo.
—De acuerdo.
—Y entonces, un día, algo muere dentro de ti.
— ¿Algo muere? ¿El qué?
Ella negó con la cabeza.
—No lo sé. Algo. A fuerza de mirar, día tras día, cómo el sol se eleva por el este, cruza el cielo y se hunde por el oeste, algo, dentro de ti, se quiebra y muere.
Y tú arrojas el arado al suelo y, con la mente en blanco, emprendes el camino hacia el oeste. Hacia el oeste del sol. Y sigues andando como un poseso, día tras día, sin comer ni beber, hasta que te derrumbas y mueres. Esto es lo que se llama histeria siberiana. Intenté representarme la imagen de un campesino siberiano caído de bruces en el suelo, agonizando.
— ¿Qué hay al oeste del sol? —pregunté.
Ella volvió a negar con la cabeza.
—No lo sé. Tal vez no hay a nada. O tal vez sí. En todo caso, es un lugar distinto al que está al sur de la frontera.
Cuando Nat King Cole cantó Pretend, Shimamoto y yo la seguimos a coro en voz baja, como antes.
Pretend you’re happy when you’re blue It isn’t very hard to do.
           Oye, Shimamoto —dije—, cuando te fuiste, pensé mucho en ti. Durante seis meses. Pensé en ti a lo largo de medio año, de la mañana a la noche. No quería hacerlo, pero me era imposible. Y, al final, tomé una decisión. No quiero que vuelvas a marcharte. No puedo vivir sin ti. No quiero volver a perderte. No quiero volver a oír las palabras «por una temporada». Ni tampoco «quizá».





 https://es.wikipedia.org/wiki/Haruki_Murakami







No hay comentarios:

Publicar un comentario

Déjanos tus comentarios, se agradecen de antemano. Saludos

Talleres de Creación literaria

Literatura en TV